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Testimonios
Estoy muy AGRADECIDO de poder haber compartido con vosotros estos días tan especiales, AGRADECIDO de haberme bañado con vuestra luz, AGRADECIDO de haber compartido vuestra sabiduría, AGRADECIDO de vuestros abrazos, besos, caricias, AGRADECIDO de vuestras palabras. Muchas gracias, porque no es fácil encontrar gente tan especial como vosotros. Siento que estoy lleno, lleno de AMOR, de FELICIDAD, de LUZ, de ALEGRIA y con unas renovadas ganas de vivir. GRACIAS Y MIL VECES GRACIAS. GRACIAS a todos vosotros empezando por Katia y siguiendo por todos los demás por vuestra LUZ y AMOR. Sigo borracho y embriagado de vuestra energía. Os quiero. Y GRACIAS TAMBIEN A DIOS POR haberme permitido conoceros.
Gracias a todos por esta NUEVA FAMILIA. Así es como me siento con vosotros y así es como me gustaría sentirme para los restos. Desgraciadamente hay veces que los amigos - por diversas razones - evolucionan o involucionan de manera distinta a nosotros y viene el desapego. Es triste, pero a todos nos ha sucedido. Sin embargo, la familia siempre está ahí. Para lo que necesites, para recomponerte cuando estás hecho trocitos. Pues eso sois para mí. Mi FAMILIA. Con todo el cariño, respeto y poder que representa para mí esa palabra. OS QUIERO una pasada.
Hoy es el día de la resaca, el día en que aparecen todas las agujetas por fuera y por dentro. Pero estas agujetas internas son el despertar de un CORAZON que estaba dormido y que seguro que ya no querremos dejar de sentirlo despierto. Desde ahora se llenará de alegría, al saber que hay otros CORAZONES que laten al mismo tiempo y que sabemos, sé, que están ahí para cuando les necesite, les necesitemos. Ya os echo de menos… Gracias, una vez más, por ayudarme a despertar mi CORAZON, por haber compartido el VUESTRO y por haberme dado TANTO en tan poco tiempo.
Aprovecho este instante para deciros a todos lo bonito que ha sido compartir con vosotros esos días tan mágicos. Mi vuelta, aunque anticipada, fue muy agradable: el azul rabioso del cielo, el moteado puro y blanco de las nubes que cruzaban el paisaje y el verde que inundaba toooooooodo lo que me rodeaba me hicieron sentir algo maravilloso: mi amor por la vida, mi reconciliación interna por las penas pasadas y esa sensación tan agradable en el corazón cuando sientes que amas y te aman... Gracias a todos vosotros por estar en mi camino y hacer que este mundo sea mejor. Os quiero.
Es un placer inmenso compartir con la gente mi sensación en esos cuatro días maravillosos. Ha sido y está siendo un regalo, un regalo que me supe dar cuándo lo necesitaba. Siempre lo describo como un arco-iris. Cuando llegué, sin saber muy bien ¡qué hacía allí! me sentía gris, con el alma contaminada, por lo visto (me dijo alguno de mis maravillosos compañeros) empecé a tener luz ya al día siguiente y me fui sintiéndome arco-iris. Todo esto fue posible primero por mi apertura, dejé los miedos, tabús, inhibiciones, en la primera ronda y me entregué por completo al gran corazón que sentí, de KATIA, un corazón lleno de amor, luz que radia sólo buena energía (no podía estar en malas manos) y después en la vivencia con mis compañeros que creo que todos hicimos lo mismo, abrirnos para dar y recibir. Ha sido y seguirá siendo un regalo hermoso que me ayuda en mi día a día una vez fuera de ese paraíso. Fueron cuatro días de magia, amor, consciencia, creatividad, descubrimiento, que estoy deseando volver a repetir. Gracias a Katia y todos los que me regalasteis vuestro tiempo y amor.
Yo me siento con algo de morriña por no teneros cerca, y hasta me parece veros cuando me cruzo con la gente por la calle y en el metro... Durante el día me vienen a la cabeza un montón de recuerdos de las experiencias vividas y todavía no encuentro palabras para definir lo que me ha pasado. He empezado la semana con una mezcla de sensaciones de paz, vitalidad y felicidad maravillosa, además de las agujetas. Me encuentro diferente, más abierta hacia los demás y contactando con la gente de otra manera, con el corazón… Espero que esta sensación me dure muuuuuuuuuuuuuuucho tiempo. Gracias a todos y todas por haberlo hecho posible, sois mis dioses.
Ha sido un placer conoceros, estar con vosotros y vivir esta experiencia especial. Me siento afortunada de haber podido disfrutar de vosotros y del barro… y del aroma… y de la paella… y de sentirme diosa y ver a divinos dioses… por cierto chicos, no perdáis ese estilo que mostrasteis luciendo el atuendo divino!!!! Salud y fuerza. Un cuoreabrazo.
Para mí ha sido una de las más POTENTES experiencias colectivas de biodanza que he podido disfrutar. Me siento aún embriagada por todo lo vivido y compartido con vosotros. Ha sido muy fuerte para mí. Y llevo tres años en esto. Pero este intensivo ha sido brutal. Mientras escribo, me noto el pecho dolorido de tanta emoción que hemos vivido. Y en cuanto a mi alma, me siento plena, llena de AMOR, todavía me brota la emoción cuando recuerdo los bellos momentos que hemos compartido. He visto tanta belleza a mi alrededor, tanta paz, tanta armonía, tanto AMOR en vuestros corazones, en mi corazón que estoy embriagada de todo ello. Estoy aterrizando aún, me duele el pecho de tanto AMOR como siento en él. Recuerdo miradas, caricias, corazones llenos de amor, instantes mágicos en soledad o en el grupo. Las bajadas al río por la mañana para meditar en sintonía con la naturaleza. Recuerdo las estrellas de la noche, las velas, la sierra nevada, el frescor de la mañana, los árboles en nuestro camino. Recuerdo el sonido de la lluvia y su visión mientras biodanzábamos en el interior de la sala. El barro en mi piel, el barro en vuestra piel. Nuestras danzas, nuestros bailes, el simbolismo que hubo en la noche de las diosas y los dioses, el cáliz con el vino, los hombres protectores y viriles, las damas femeninas y compañeras. Recuerdo las músicas... Para mí la ronda final del domingo fue muy poderosa. La más potente que he vivido. Me descubrí admirando en paz y muy concentrada vuestra belleza, vuestras palabras. Os echoooooo de menoooooos, os llevo ya en mi corazón y querría volver a estar con vosotros muy pronto. Hay tantas cosas que querría deciros a cada uno, de mis momentos vividos con vosotros. Katia, nuestra diosa favorita, hay tantos ejercicios de biodanza que me han impregnado para siempre… Recuerdo las conversaciones con cada uno de vosotros, los instantes en que compartimos algo juntos. Os quiero a tod@s un montón. Sois mis hermanos del alma. Os llevo en mi corazón. Gracias por estar ahí, por saber que estáis en el mismo camino, en la misma luz que nos llena a tod@s.
Uff!! Que subidón. Yo no sólo no tengo agujetas en el alma, si no que seguiría ejercitándola así hasta desfallecer. ¡Qué maravilla hemos vivido! Llegué a casa repleto de fuerza y energía, de amor, el que nos hemos entregado.
Katia, tu magia me ha llegado, y creo que esto es sólo el comienzo de algo especial...A todos los demás daros las gracias por todo y desearos lo mejor, me ha encantado conoceros y convivir estos días con vosotros. Sé que pronto volveré a veros y eso me llena de alegría.
Me siento extraño, un tanto vacío y a la vez enfadado ya que he vuelto a la realidad y me veo en la misma situación que antes de ir a Arenas, aunque mi corazón está diferente. Digo enfadado porque tengo la sensación de que todo va a seguir igual (que impaciente soy…). Intentaré que poco a poco cambien las cosas ya que no estoy contento con algunas de ellas. Todos habéis puesto vuestro granito de arena para hacer que cada uno viviera lo que hemos vivido. Al igual que hay cosas que nos "detonan" el enfado, tristeza, odio, apegos...., también hay personas, cosas y situaciones, como hemos podido ver y sentir, que nos "detonan" el Amor, la alegría de vivir, y son en esas cosas en las que nos deberíamos de centrar; y en las otras.... bueno, en las otras intentar mirarlas con los ojos del Corazón. Respirar, contar hasta diez y dejarlas pasar y verlas como un aprendizaje. Recordar que nada es verdad ni es mentira, que todo depende del cristal por el que se mira. También os diré que al igual que quedamos con los amigos para ir a cenar, al cine…ir al campo...deberíamos de quedar para reunirnos a beber y comer del Amor de todos. De momento no conozco a mucha gente con la que poder compartir así e imagino que os puede pasar lo mismo. Todos hemos hecho un hueco en nuestras agendas para ir estos días a Arenas. Yo propongo que podríamos abrir nuestras agendas y buscar un día al mes (o cuando acordemos) para practicar este ejercicio tan bello que es el dar y recibir Amor. Deberíamos de practicarlo más a menudo hasta incorporarlo en nuestra vidas, y veo que TODOS lo echamos de menos.